El peluquero quedó procesado por una quiebra fraudulenta y atraviesa uno de los peores momentos.
Complicado. Roberto Giordano, procesado por quiebra fraudulenta.
Mala noticia para el peluquero Roberto Giordano: quedó procesado por una quiebra fraudulenta y sus bienes fueron embargados en 57 millones de pesos.
Junto a otras ocho personas, el empresario de la moda fue procesado por el juez de instrucción porteño Gustavo Pierretti. En la investigación, intervinie la Fiscalía de Instrucción 49, a cargo de Paula Asaro y la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos.
La semana pasada, había recibido una condena por no pagar sus impuestos, luego de que la justicia demostrara que "maquillaba" esos incumplimientos mediante la utilización de varias sociedades. Un juez le había impuesto la obligación de no ausentarse de su domicilio real por más de 24 horas sin dar aviso a la Justicia.
Ahora, según la página "fiscales.gov.ar" Pierretti le imputó a Giordanohaber sustraído y ocultado a sus acreedores (principalmente laborales) al menos 17 inmuebles, a través de sociedades fantasmas y testaferros.
Giordano en Punta del Este, antes de uno de sus desfiles.
Aunque se oficializó hoy en el portal del Ministerio Público Fiscal, el juez de instrucción señaló -en la resolución firmada el 16 de agosto- que se encontraban reunidos elementos de convicción suficientes para procesar a Giordano por aparentar un estado de insolvencia que no guardaba relación con su realidad económica. Según dijo, "la esforzada y prolija artimaña pergeñada por Giordano a la cabeza ha logrado su fin: frustrar los derechos de la masa de acreedores".
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Giordano tiene 69 años. El año pasado saltó a las tapas de las revistas del corazón, por un escándalo: un affaire con una peluquera con la que salía de noche (antes de volver a dormir a la casa que comparte con su esposa. Mirta). Por distintas circunstancias -personales y legales-, desde hace unos años, no atraviesa un buen momento.